sábado, 29 de agosto de 2009

Diferentes

Hoy tomo los rayos del sol como aliento. 29-8-09
Desde los colores del alba me viene un mensaje ya aprendido, un nuevo día, una nueva situación; el juego ha cambiado para él también, ahora me explica la soledad del límite, cercano ya a otro universo. En los bordes del final se presenta un mundo de incertidumbre, totalmente diferente. He de tomar nota y cantarlo, los salmos están ya al final del trayecto. He observado que habla con voces nuevas, un lenguaje desconocido, lo entiendo por una razón que desconozco, se oye muy leve.

Algo diferente viene a iluminar los nuevos días, pero la aurora me dice que los cambios son imperceptibles, no afectan a nuestro mundo y si afectan, ¡son inapelables!

Reivindicar lo diferente es una quimera y al mismo tiempo una ilusión paradójica.

Todos somos diferentes, no podemos evitarlo. ¿Hay en la tierra un ser igual a otro…? ¡no!, no hay dos seres en la tierra iguales, por tanto, no hace falta reivindicar algo que es evidente. Ser iguales sería salir clonados de un patrón, de una máquina de montaje, de un mismo molde. Somos únicos y diferentes pero con derechos y obligaciones iguales.

Queremos ser aquello que no somos, ¡iguales! Agrúpense los iguales, comunistas, socialista, demócratas, cristianos, musulmanes, andaluces, catalanes, vascos, algonquinos, fang o fueguinos… ¡iguales! A los dos días irrumpirá la diferencia y volveremos otra vez a la cuestión de fondo; parte de la condición humana se manifiesta en la discordia y si no tiene una entidad hay que crearla. ¡Es una fuente de energía incalculable!

La mentira

Nuestra mentira es un estado que germina y crece dentro de nosotros como una planta, desde la cuna se va colando pletórica y triunfante la quimera, la “diferencia”, cargados de miedos y enemigos, de buenos y malos de justos e injustos nos mantenemos en una permanente tragedia por tener los pies sobre una… ¡mentira!

Al final la mentira ha colado tanto en nuestra mente que es lo único en el universo que es verdad; entonces es cuando se entrega la vida cargado de metralla… En junio, Ali Ghasemi, un opositor al régimen iraní, practicó la “lucida desesperación”. Como Fénix se prendió fuego delante de la embajada francesa, alguien habló por su boca… Él no renacerá en los colores de la aurora en forma de mujaidín.