lunes, 1 de febrero de 2010

Semillas viejas, semillas nuevas.

Como semilla a la deriva. 1-2-10


Semillas viejas.

El sol es testigo de mi cautiverio.

Acaricia la tierra con besos cálidos

Deméter me busca entre aullidos.

Se corona entre ritos mistéricos.


Vuelo como semilla a la deriva

Es un viaje de gozo interminable

La tierra me devora como a Perséfone.

El Hades, invierno frío me cubre de sombras


Voy a Eleusis cargado de esperanza.

El licor me abre la puerta del asombro.

Voy más allá de la luz de los ojos.

Busco la madre, matriz cálida.


Semillas nuevas.

Otra vez en el ciclo de la naturaleza

El tiempo mineral ya es sueño pasado

Tengo miedo a las tinieblas y a la muerte.

Con los rayos del sol activo mi parte mortal.


El templo del amor es hoy un lupanar.

Llamo a la puerta de las bacantes.

Me reciben vestidas de fantasía.

Dejo cien euros en el plato limosnero.


Como Deméter y Perséfone me abrazan.

¡cautivan como diosas!

Con la verga inhiesta las envisto.

Una a una las cubro en la danza.


Entro y salgo de la gruta de las maravillas.

En la hija me vierto como polen de olivera.

La semilla se ha perdido entre muros.

Límites elásticos, el devenir es incierto...


¡brota o duerme en la tierra!


XXXIII


Por los albañales

Me arroja mi madre

Con dos puñales


XXXIV

Tus derechos

Menos que un vástago

De mala madre


XXXV

El fracasado

Por ser el más canijo

Tiene la culpa