miércoles, 13 de enero de 2010

Nota al lector

La ventana del asombro el día de la concepción. 13-1-10

El sueño revelador

En los cantos de renacimiento se escuchan los jadeos amorosos, las risas y trinos del ruiseñor. Entonces el oficiante tiene una erección súbita y se desmaya, cae subyugado por flaqueza espiritual, por entrega corporal y por bajada de tensión. Sus huesos se han desleído al instante, su mente se ha licuado con los colores del alba y su espíritu entra en un estado de ingravidez. El lugar está cargado del poder sensual de las semillas, se excita como un salmón trepando el río y lanza chorros de esperma que quedan prendidos de las hojas. Así poliniza las plantas, siembra la tierra con los fermentos del bien y del mal y fecunda el devenir del nuevo Fénix, el cual, a su vez se estremece entre erecciones.


Bajo la cúpula ligera canto la primera cunana. 13-1-10


Nota para el lector que no ha seguido los acontecimientos de Fénix.


Terminado el periplo del sol por el tiempo mineral, Fénix padre ha desaparecido entre partículas, entre simetrías primordiales. Después de millones de años, estas se han organizado en forma de vida, (ya que era posible hacerlo) y se dispone a asombrase de nuevo en forma de Fénix renacido.

Espera encontrar un nuevo ciclo donde todo es desconocido y el camino le lleva por las sendas del descubrimiento y la creación. Nada existe en el recuerdo, nada ha de pagar puesto que no tiene pasado, sólo tiene un cometido heredado y ya descrito. ¡Todo será diferente!


La experiencia terrible del periodo anterior no la recuerda; no ha quedado ni una partícula arrastrada por los acontecimientos. El misterio de la vida se revela a cada instante y el gozo de vivirla empuja aventuras extraordinarias y dolorosas. Es el momento de las elecciones, cada ser recoge y escoge. Lo que nos es dado, ofrecido, se presenta al alba en la senda de las posibilidades...


Ahora no es el padre el que habla por los espacios siderales y paradójicos de las partículas, ahora es un grano de mijo fecundado en el vientre de la tierra; una nueva metáfora. Por tanto, se trata de un nuevo sol, el nieto del iniciador de esta historia que empieza a cantar con voz propia. En este nuevo ciclo se describen las cunanas.

Espero que sean de interés; los cambios serán insólitos, violentos y sorprendentes, como lo es la vida.

2 comentarios:

IiX dijo...

Beberemos de las cunanas con avidez!

Rufino Mesa Vázquez dijo...

Así lo espero; como también espero las experiencias que me ayuden a describir las transformaciones de la vida de un ser en el vientre de la madre.