sábado, 28 de noviembre de 2009

Legajo II. VII

Cimbran los limites bajo la luz-27-11-09

Legajo II. VII


Mis pies caminan solos.

Llevan sandalias aladas.

Devoran los instantes como Saturno.

En mi boca estáis perdidos.


Acuso el paso de los días.

Los cruces de los caminos acuso.

En la incertidumbre os dejo.

Acosados por el miedo.

Sumidos en el dolor.


Los términos del contrato no están claros.

Las palabras son parcas en soluciones.

El campo es abierto por la espada de la muerte.

Los infiernos se presentan en vida.


El fuego arrasa los pensamientos.

Como piras permanente arden las ideas.

El espíritu huye a los rincones de la mente.

Las ánimas no existen para ser quemadas.


La calavera es caja de luz que se apaga.

Como cunas vacías dejo las mentes.

Los campos en barbecho y exterminio.

Las manos doloridas las acaricio y duermen.


Entre gritos apagados os deposito en las hoyas.

La palabra y el engaño se hunde con vosotros.

Los corazones heridos sangran eternamente.

Las manos desamparadas claman rendidas.


El dolor se hace llaga eterna en el pecho

Tened las manos libres, enjutas.

Que suenen en el cazo como tabas secas.

Que arranquen esparto y palma.

Con un chasquido afeitáis el suelo.


Hacer zapatos para los niños.

Escobas ligeras para barrer el templo.

Recoged mi ceniza con el dolor del pecho.

Guardad la lúcida palabra del vencido.


!Ese es hoy mi mandato!

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